Actualización de las represalias a Lolo en Ponent (Lleida)

Este fin de semana nos han llegado novedades sobre las represalias que está sufriendo Manuel Noguera, «Lolo», en la prisión de Ponent.

Lolo llevaba unos meses en el DERT (Departament Especial de Règim Tancat), y hace unos días lo devolvieron al módulo 6. El viernes por la mañana un compañero de Lolo avisó de que esa mañana se lo habían llevado al DERT sin venir a cuento, y hasta la tarde no se pudo comunicar con él. Está MUY quemado. Esa misma mañana desayunó, hizo una llamada telefónica, y justo después lo llamaron por megafonía. Cuando se presentó al jefe de servicio le preguntaron que «qué había pasado en el comedor». Lolo dijo que nada, y el jefe de servicio ordena llevarlo inmediatamente al DERT de nuevo, sin dar motivos ni explicaciones. Lolo lleva desde el viernes pidiendo explicaciones y pidiendo que revisen las grabaciones del comedor, porque no pasó absolutamente nada, pero los carceleros hacen oídos sordos y dicen que si no está conforme con lo que pasa que los denuncie. Es por esto que ha pedido que hagamos esta pequeña publicación explicando lo sucedido y comentar que estas represalias son constantes. Desde fuera, la prisión de Ponent no da ninguna explicación a lo sucedido.

Por desgracia no es ninguna sorpresa ver carceleros organizando represalias personales en el opaco sistema penitenciario, y cuando alguien se atreve a pedir explicaciones, los agresores corren a esconderse detrás del monstruo burocrático. La burocracia penitenciaria protege a su brazo ejecutor a base de silenciar las denuncias de las personas presas.

Por muy acostumbradas que estemos, no podemos olvidar que el modelo carcelario también se sustenta en hacer pasar el abuso sistemático con incompetencia «puntual». La humillación, las agresiones, y empujar a las personas por encima de sus límites son considerados «errores organizativos», «fallos de comunicación», «mala praxis»… y eso solo cuando realmente son realmente tan torpes como para dejar pruebas del abuso en un terreno escondido a los ojos del mundo, donde son omnipotentes y nosotras quedamos a su merced. En esta situación, denunciar, desobedecer y rebelarse es simplemente arañar la dignidad.

Os animamos a escribir al compañero y a llamar a la cárcel para pedir explicaciones: 973 22 03 33


Manuel Noguera Mazuecos
Centro Penitenciario Ponent
C/ Victoria Kent s/n,
25071, Lleida

Fuente: La Corda

 

 

Abusos en la cárcel de Morón de la frontera (Sevilla II) con la excusa del coronavirus

Nuestro compañero José Ángel Martins Mendoza, Peque, fue trasladado el otro día, desde la cárcel de Albolote donde se encontraba a la de Morón de la Frontera (Sevilla II) en una conducción «especial» que podemos llamar de despiste, porque fue trasladado a Granada desde la Cárcel de Villena unos diez o doce días antes y de allí a Sevilla, sin previo aviso. Eso se lo hacen a una persona que ha estado siendo trasladada de cárcel desde hace varios años, al menos una vez cada seis meses y hasta con mayor frecuencia, por supuestos motivos de «seguridad», desarraigándole de su familia, de sus compañerxs y amigxs de la calle, también de los de dentro, intentando, al parecer reducirle a una soledad y desvinculación humana cada vez mayor. Y, por si todo eso fuera poco, al llegar a Morón, le encierran en una celda con lo puesto y se niegan a entregarle sus pertenencias personales, que han viajado con él en el mismo canguro, dicéndole que quedan «en cuarentena» su televisor, sus libros, su ropa, sus fotos, sus papeles personales… no se sabe por cuanto tiempo. Pero si él mismo ya está aislado de todo el mundo, completamente solo en una celda, en un departamento de aislamiento y saliendo completamente solo al patio… ¿Cuáles son los criterios médicos o de cualquier otra índole que justifican tal medida? ¿Y no se tiene en cuenta su efecto deshumanizante, el ensañamiento que supone en una situación en la que el compañero ya se encuentra privado de casi todo? Evidentemente, se trata de una arbitrariedad ideada por alguna autoridad carcelera especialmente sádica, con alma de verdugo. ¿Y quién protegera de semejante abuso al compañero, encerrado como está en un departamento de máxima crueldad, en manos de carceleros sin escrúpulos sobre cuyo comportamiento no se ejerce ningún control. A continuación, teléfonos, fax y direcciones de correos para dirigirse a las autoridades responsables protestando pr el abuso contra nuestro compañero. Al final del todo la dirección a la que se le puede escribir a él, para darle ánimos y que vean que no está solo.

Cárcel de Sevilla II

Teléfonos: 955 855 941; 955 85 51 00; 955 85 51 07

E-mail: sgpma.moron@dgip.mir.es

Secretaría General de Instituciones Penitenciarias

Teléfono: 91 335 47 00

Fax: 913 354 052

Juzgado de Vigilancia Penitenciaria nº 11 de Sevilla

Teléfonos: 95 554 40 53; 955 54 40 55

Fax: 95 500 51 94

E-mail: AtPublico.JVigilancia.11.Sevilla.JUS@juntadeandalucia.e

Para escribir a Peque, darle ánimos y que vean que no está solo:


José Ángel Martins Mendoza
Centro Penitenciario Sevilla II
Paraje las Mezquitillas. SE-451, km 5,5
41530 Morón de la Frontera (Sevilla)


Fuente:
Tokata