Presentación del libro «Por qué abolir la cárcel»

¿Por qué abolir las prisiones? Razones no faltan. La cárcel es sinónimo de violencia, una violencia implícita y explícita de un sistema basado en el dolor, la pena y la venganza. Incluso la mejor cárcel resulta sustancialmente inaceptable. El libro que presentamos en su edición en castellano, nos ayuda a poner en el debate público y a cuestionar la existencia de la prisión, el uso del derecho penal y la cultura del castigo como respuesta a problemas sociales creados por el sistema capitalista-racista-heteropatriarcal en el que vivimos.

POR QUÉ ABOLIR LA CÁRCEL

Edicición en castellano de un magnífico libro que recorre los argumentos del movimiento «No prisón» en Italia, para cuestionar la existencia de la cárcel como respuesta al delito y puede servir como inspiración para promover o reforzar similares iniciativas en el Estado Español.

Las razones del Movimiento “No Prison”, de Livio Ferrari y Giuseppe Mosconi, que ha sido traducido por Alicia Alonso y editado por Zambra/Baladre en noviembre de 2021.
Nos parece fundamental que entre dentro del debate público el cuestionamiento de la existencia de la prisión, el uso del derecho penal y la cultura del castigo como respuesta a problemas sociales creados por un sistema capitalista, racista, heteropatriarcal, individualista y altamente competitivo.

El texto va desgranando los argumentos que utiliza el Movimiento “No Prison” en Italia para cuestionar la existencia de la cárcel como respuesta al delito y puede servir como inspiración para promover o reforzar iniciativas similares en el estado español. No faltan razones para abolir las prisiones: la cárcel es sinónimo de violencia y refleja un sistema social basado en el dolor, la pena y la venganza.

La pena de cárcel es un castigo que no reinserta por varias razones bien conocidas:
– porque la mayor parte del presupuesto empleado se utiliza en medidas de seguridad y las tasas de reincidencia son altas debido a su carácter criminógeno.
– porque es discriminatoria, puesto que gran parte de las personas encerradas son pobres o con escasos recursos y oportunidades.
– porque empobrece a una mayoría, ya que cuando las personas salen habrán perdido sus empleos y sus bienes (si los tenían) y en algunos casos hasta sus familias.
– porque enferma, pues las condiciones de encierro provocan dolencias físicas y psíquicas, muchas de ellas irreversibles.
– porque castiga a inocentes, debido a que la condena se extiende a toda la familia y personas allegadas que no han cometido ningún delito.
– porque estigmatiza, dificultando sobremanera la reincorporación de las personas al lugar de procedencia.
– porque no repara a la víctima, pues se basa fundamentalmente en la venganza y no en la reparación del daño o desequilibrio causado.
– porque reproduce la violencia, ya que ésta forma parte inescindible de las instituciones y en concreto de la cárcel, tal como la conocemos.

Se puede objetar que abolir las prisiones sea una utopía. Lo mismo se pensaba de los manicomios y hospitales psiquiátricos, pero en el año 1978 en Italia, se aprobó la “Ley Basaglia” que los abolía.

Como decía Galeano, la utopía nos sirve para caminar. Así los caminos para conseguir la utopía deben comenzar por reducir el uso de la prisión a su mínima expresión para lograr que algún día desaparezca. Podría empezarse por ampliar las concesiones de terceros grados, incrementar las penas alternativas, acabar con la violencia extrema que suponen los primeros grados o el régimen de aislamiento, legalizar y regularizar la producción, distribución, venta y consumo de todas las drogas, incentivar la justicia restaurativa, reducir las condiciones de empobrecimiento con la renta básica de las iguales… y todo ello con más organización, comunidad y apoyo mutuo. ¿Por qué no? Abolir las cárceles y la cultura del castigo es nuestra utopía.

Gentes de Baladre

 

Presentación de «Pájaros azules. Un retrato del sistema carcelario» con Santi Cobos y la actuación de la bailaora Askoa Etxebarrieta «La Pulga»

El jueves 14 de noviembre, a partir de las siete y media de la tarde,  La Libre  albergará la presentación del libro Pájaros Azules. Un desgarrador relato de primera mano y una crítica feroz contra el sistema penitenciario de la mano de Santi Cobos (26 años preso y casi 20 de ellos recluido en el horror de las celdas de aislamiento).
Al termino y dentro del ciclo «Artistas comprometidos», gran sorpresa con la actuación de la bailaora de flamenco Askoa Etxebarrieta «La Pulga» que bailará «Versos de intramuros».

En ese relato, en ese testimonio de Santi Cobos mediante el que describe el sistema penitenciario, se mezclan la crudeza, el humor, el odio, la ternura y la reflexión. «Sí, me considero un superviviente. Porque durante muchos años tuve asumido que no sobreviviría a la cárcel. Porque he salido vivo de una guerra, a diferencia de la mayoría de mis compañeros. Por eso toda esta conversación, y la predisposición a dar testimonio allí donde me llamen. Dar testimonio es lo más valioso que puedo hacer. Denunciar todo lo que no pude denunciar durante aquellos años: el sistema carcelario, la impunidad de los carceleros, las torturas, todas las personas que se dejaron allí la piel como perros, y las que se la siguen dejando hoy en día. Este libro también es en su honor. Siento que tengo la opción de plantar una pequeña semilla de empatía hacia las personas presas, de conocimiento sobre lo que ocurre en las cárceles, de duda hacia el sistema de castigo basado en el encierro.

A veces me preguntan, sobre todo en ambientes religiosos, “¿Les has perdonado?”; “Sí, por supuesto. Porque, como escribió Oscar Wilde, ‘Perdona siempre a tu enemigo, no hay nada que le enfurezca más’”. Y se parten todos de risa. Esto tenemos que meterlo en el libro, sin falta.»

En la cárcel, salud no es solo prevenir la COVID-19…

Desde que empezó toda la historia de la COVID-19, se han justificado las medidas represivas, de control, castigo, incomunicación y mas aislamiento a lxs compas de dentro con el hipócrita argumento de que se hacía por la misma salud de las personas presas. ¿Desde cuando ha importado la salud de lxs presxs? Los lotes de higiene son insuficientes, la comida a menudo de mala calidad, gente chapada en una celda mas de 20 horas al día, médicos-carcelerxs que apenas te visitan o te recetan un paracetamol para cualquier dolencia, mandar a la gente a centenares de kilómetros de sus familiares y entorno….

NO TIENE SENTIDO HABLAR DE PREVENCIÓN Y SALUD EN UN CENTRO DE EXTERMINIO.

Fuego a las cárceles y libertad para las personas presas!

Fuente: Suport presxs Lleida

Economía política del saqueo y sistema penal

Los sistemas penales tienen dos funciones principales: una material que contribuye a sostener la acumulación concentrada de capital y una simbólica, que funciona naturalizando un orden antisocial y legitimando las tareas de control que el estado-mercado asume para garantizar dicho orden. Tal es el punto de partida imprescindible de toda práctica y todo discurso que quieran resistir y transformar esa estructura criminal que nos gobierna, en el Reino de España como en tantísimos otros hábitats neoliberales. Desde los orígenes de la cárcel como forma de castigo y, más aún, desde el principio de los tiempos capitalistas, las penas han evolucionado en íntima relación con las exigencias impuestas por eso que mal llamamos «modelo económico». Daniel Jiménez

Para escuchar la charla pincha aquí

«Las cárceles no deberían existir y habría que apostar por alternativas no de castigo»

Entrevista a Libertad Francés, coordinadora de Salhaketa Nafarroa, sobre la situación de los y las presas en las cárceles dependientes de Instituciones Penitenciarias.

2019 fue un año especialmente duro para los presos y presas en las cárceles dependientes de Instituciones Penitenciarias y es que, por ejemplo, eran 5 los presos muertos en la cárcel de Zaballa. Es por ello, que queríamos volver a traer la situación de los presos y presas en las cárceles del Estado Español, que dependen de Instituciones Penitenciarias. Para ello, hemos entrevistado a Libertad Francés, coordinadora de Salhaketa Nafarroa.

Para escuchar la entrevista pincha aquí.