La compañera Carmen Badía, mujer presa en la enfermería de Zuera (Zaragoza) denuncia que el pasado viernes 31 de julio, un carcelero rubio llamado Alejandro – y apodado “El guaperas” o “El barón Dandi”-, abusó sexualmente de ella. Parece ser que no es la primera vez que este personaje abusa de mujeres reclusas, además de ser conocido por su prepotencia y chulería, su facilidad por poner partes y sanciones, y por escupir cosas como “si fuera por mi os pondría a todos una soga en el cuello”.
El episodio empezó porque dicho carcelero quiso presionar a Carmen para que esta le comprara un móvil por 500 euros. Tampoco es la primera vez que este energúmeno hace esta clase de negocios. Le insinuó a Carmen varias veces este tema, pero ella se negó reiteradamente y le echó en cara que se sacara un sobresueldo a costa de las carencias y privaciones de las personas de dentro.
Entre 19’00h y 20’00h Alejandro entró en la celda de Carmen. Recordamos que un carcelero hombre no puede entrar solo en la celda de una mujer presa. Muy afectada y con esfuerzo de tener que revivir la situación, Carmen nos cuenta que el carcelero le echó en cara que ella no quisiera comprarle el móvil y otras cosas ocurridas anteriormente entre ella y este tipo. Comenta que este arrancó una cortina que ella tenía colgada y se bajó los pantalones. Carmen se encontraba sentada en su silla de ruedas, y el hombre acabó obligandola a realizarle una felación, o por lo menos a intentarlo restregándole su miembro por la cara hasta correrse. Carmen le dijo que si no sacaba el pene de su cara se lo iba a morder, pero él le dio dos bofetones.
La compañera está dispuesta a no callar ante este grave abuso y hacerlo público desde distintos ámbitos. Quiere denunciar este abuso sexual, el abuso de poder por parte de este desgraciado y la humillación sufrida. Desde este mismo día Carmen está echando instancias para que la vaya a ver el Jefe de Servicio y/o el Jefe de Seguridad, pero nadie ha ido a verla. Sí la atendió el médico porqué la vio muy nerviosa, pero estaban dos carceleros presentes y ella tenía miedo y en aquel momento no se vio con fuerza para contarlo.
Carmen está dispuesta ha hacer publico el tema y no callar. Por dignidad y por ser consciente de que, si no se saca a la luz el tema y se presiona, mas compañeras van a seguir pasando por esta clase de situaciones.
Ahora mismo sentimos mucho asco y mucha rabia. Todo el apoyo a la compañera. Animamos a todxs, dentro y fuera, a solidarizaros con ella y mostrar el repudio a esta clase de abusos contra las presas.
Para escribirla:
Carmen Badia Lachos
Centro Penitenciario de Zuera
Autovia A-23, km 328
50800 Zuera (Zaragoza)
Fuente: Suport presxs Lleida