A los pueblos, individuxs, comunidades y territorios en lucha y resistencia.
A quienes se rebelan ante este presente de opresión y miseria.
A nuestras manadas, familias, amigxs, complicidades, compañerxs y amores repartidos por el mundo.
A todxs!!:
Lxs prisionerxs anarquistas y subversivxs de la guerra social Mónica Caballero Sepúlveda en la cárcel femenina de San Miguel, Marcelo Villarroel Sepúlveda, Juan Flores Riquelme y Joaquín García Chanks en la cárcel de alta seguridad, Francisco Solar Domínguez en la Sección de Máxima Seguridad y Pablo Bahamondes Ortiz en el Módulo 2 de la cárcel empresa de stgo 1 y Juan Aliste Vega en la Cas adhiriendo pero no en huelga por razones médicas; declaramos nuestra total insistencia en la decisión de continuar en esta justa movilización en la que transitamos ya los 31 días desde que 9 compañerxs secuestradxs, en diferentes períodos en las cárceles chilenas, decidiéramos dar inicio a esta movilización con características de huelga de hambre liquida e indefinida activando así una sentida exigencia en el mundo de la prisión y ,del mismo modo, aunando a diferentes generaciones de compañerxs como evidencia ineludible de la continuidad del conflicto con el Estado, la cárcel y el capital en un contexto indesmentible de Guerra Social.
A los 17 y 18 días de este trayecto con el cuerpo como arma de lucha, los compañeros detenidos en el contexto de revuelta permanente y hoy prisioneros en la cárcel empresa stgo 1 módulo 3 Tomás, José y Gonzalo depusieron el movimiento por “razones de salud y falta de experiencia” sin embargo quienes continuamos movilizadxs damos cuenta de la clara voluntad expresada por los compañeros de dar este necesario paso de lucha colectiva y les saludamos en el aprendizaje cotidiano de vivir la resistencia milimétrica al todo diario del encierro carcelario.
Por otra parte en un lazo indestructible de complicidad insurrecta desde el aislamiento de alta seguridad en la cárcel de Terni, Italia el 12 de abril el compañero anarquista español Juan Sorroche Fernández asume una huelga de hambre en solidaridad con nuestras exigencias haciendo tangible la belleza de aquella internacionalista hermandad antiautoritaria.
Abrazamos su gesto cómplice y lo hacemos nuestro invitándolo a transitar estos territorios de lucha y resistencia.
El camino trazado en este tiempo intenso de lucha es la cristalización de la palabra hecha acción.
Desde las cárceles chilenas nuestro grito de guerra nuevamente recorre el mundo haciendo universal nuestro llamado subversivo y anárquico.