Entidades sociales siguen exigiendo al Ministro del Interior e Instituciones Penitenciarias la adopción de medidas respetuosas con los derechos de las personas presas
- Urge la excarcelación, entre otras, de personas mayores de 70 años, enfermas graves o con enfermedades crónicas y mujeres embarazadas
- Se solicita, además, la adopción de medidas encaminadas a retomar la actividad dentro de las prisiones
Esta mañana, aprovechando la comparecencia del Ministro de Interior Fernando Grande-Marlaska, numerosas entidades sociales han hecho llegar a los Diputados y Diputadas un escrito con las medias que urge adoptar por parte de la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias para hacer frente al Covid- 19 en las cárceles y garantizar el respeto a la dignidad y los derechos de las personas presas.
Esta petición, en parte, viene a reiterar la que ya realizaran el pasado día 23 de marzo a los distintos grupos políticos que componen la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados, a través de la cual ponían en su conocimiento la situación en la que se encuentran las personas privadas de libertad durante la pandemia provocada por el Covid-19 y solicitaban la adopción de medidas respetuosas con los derechos de las personas presas.
Según indican las entidades, y a pesar de que entre personas presas y personal funcionario ya se contabilizan un millar en observación médica o cuarentena y 238 positivos en Covid-19, “ni el Ministerio del Interior ni la Comisión de Interior del Congreso de los Diputados han prestado atención a la situación de las personas privadas de libertad, así como a sus familiares y allegadas” ni se han adoptado medidas acordes con los principios establecidos por los Organismos Internacionales.
Denuncia contra la macro cárcel de Puig De Les Basses, Figueres
Desde el Colectivo Anticarcelario Rossinyol de Girona queremos denunciar la situación actual de Ismael Dorrego Martínez.
Ismael estuvo preso en Brians I, cárcel en la que sufrió amenazas y malos tratos, tanto físicos como psicológicos. Fue trasladado a Puig de les Basses, pero no ha cambiado a nada en cuanto a su situación.
El pasado 15 de abril recibió una brutal paliza por parte de funcionarios de prisiones del DERT (aislamiento), con la complicidad de la doctora de servicio en ese momento. Las personas responsables fueron: Don Javier nº 6687, coordinador Sergio nº 6621, Vigilantes: nº 6970, nº 6392, nº 5122 y la doctora Ana con nº 0854.
Entraron en la celda con cascos y escudos, esposaron y ataron a Ismael y le golpearon, provocándole un esguince en el pie,por lo menos que sepamos, ya que aún no hemos recibido ningún tipo de parte médico sobre todo esto.
Ya hace tiempo que Ismael denuncia que no le dejan salir al patio las 3 horas que le corresponden, y que además cuando sale es siempre solo, evitando que pueda hablar e interactuar con otras personas.
«El camino de la prueba de Covid-19 para un preso»: Enfermería, aislamiento, palizas y cunda a la Unidad Hospitalaria Psiquiátrica Penitenciaria
La mañana del pasado miércoles 15 de abril, un preso de la cárcel de Lledoners, Barcelona, que llevaba casi 15 días aislado en la enfermería del centro a la espera del resultado de la prueba de Covid-19, fue llevado al DERT (aislamiento), por varios funcionarios desde donde, según la versión de los guardias, lo tuvieron que trasladar rápidamente a la UHPP, Unidad Hospitalaria Psiquiátrica Penitenciaria, en Brians I, Barcelona, porque “estaba muy nervioso y decía cosas sin sentido”.
Sabemos por fuentes próximas a él y por parte del equipo de UHPP que el resultado de la prueba fue negativo pero, al parecer, según el protocolo de prevención, se debía mantener al interno 48 horas más aislado porque presentaba síntomas. Esto, sumado al ingreso en la UHPP, significó la incomunicación total del preso hasta que ayer, viernes 17 de abril, después de más de 6 días sin que su familia pudiera recibir una llamada suya.
¿¡Sanidad entre cuatro muros!?
CUIDADOS Y ATENCIÓN, NO CASTIGO Y AISLAMIENTO
Las torturas y vejaciones se han convertido en la idiosincrasia propia de los centros penitenciarios, y es que, no nos engañemos, la cárcel por sí misma enferma y asesina. Son muchos los determinantes que conllevan al mal estado de salud de las personas presas, lo que, sumado al mayor riesgo de padecer enfermedades infecciosas, inmunodepresoras o crónicas, termina derivando en un elevado índice de problemas relacionados con la salud mental que llevan, en última instancia, al suicidio.
Juan Ruiz desde la cárcel de Tarragona
En las ultimas semanas hemos recibido varias cartas de Juan Ruiz Lopez, preso en la cárcel de Mas d’Enric, en Tarragona. El compañero lleva ya varios meses en este centre de exterminio, después de haber sido trasladado desde la cárcel de Lleida. En los últimos dos años ha sufrido varios traslados sin motivo aparente de Lleida a Tarragona y al revés.
Juan pasa la mayor parte de meses en aislamiento.